Finn Bálor y The Street Profits arruinaron la fiesta de “The Bloodline” para ir por sus respectivos títulos, en medio de las dudas de Paul Heyman sobre la aparición de Brock Lesnar en SummerSlam. Además, Becky Lynch estuvo de vuelta y Bianca Belair aseguró una futura revancha contra la irlandesa por el SmackDown Women’s Championship. Episodio transmitido desde el Simmons Bank Arena en North Little Rock, AR.
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Repaso de todo lo sucedido con el SmackDown Women’s Championship aquella noche del sábado en Las Vegas y la mesa de comentarios tenía a Michael Cole, Corey Graves y Kevin Owens, estos últimos en reemplazo de Pat McAfee, contagiado de COVID-19.
Becky Lynch, la nueva SmackDown Women’s Champion, hacía su regreso a la marca bajo una gran ovación. The Man destacó en Little Rock no sólo estar de vuelta, sino hacerlo también en la cima, que extrañó a todo el mundo y que cuando entregó el RAW Women’s Championship, fue como entregar su identidad y aseguró que trabajó de forma ardua para recuperar su sitial. Becky recalcó que ahora tiene una nueva vida y otras prioridades, pero que si antes era peligrosa, ahora no nos imaginábamos qué tan letal puede ser. Cuando Becky se refirió a lo sucedido en SummerSlam, la ovación pasó a abucheos, dijo entender lo controversial que fue su irrupción y que la gente se pudo sentir engañada, pero cuando iba a pedir perdón, se retractó de forma burlesca y justificó su accionar argumentando que todo lo que necesitaba era tomar una oportunidad, porque el que diga que sabe lo que ella planea, simplemente no sabe nada de su carrera.

Bianca Belair interrumpía. La ex-campeona se llevó todos los vítores, declaró no tener excusas pero que no iba a dejar pasar lo que pasó en SummerSlam, porque había trabajado demasiado duro para que Becky reapareciera y lo borrara todo en 26 segundos, que el sábado aceptó su reto express, pero que ahora estaba lista para recibir su revancha de inmediato.

Pero no eran las únicas que reclamaron su oportunidad. Zelina Vega apareció y se burló del “llanto” de Bianca, aseguró que debía volver al final de la fila y se postuló como eventual aspirante al SmackDown Women’s Championship. Carmella llegó diciendo que Becky debía enfrentarse a The Most Beautiful Woman Of WWE porque en SummerSlam la tuvieron una hora esperando ser la reemplazante de Sasha Banks y la dejaron con el maquillaje hecho. Y Liv Morgan salió a encarar a Zelina y a Carmella por reclamar oportunidades después de perder semana tras semana, por lo que la aspirante legítima debía ser ella. Carmella respondió que Liv salía a reclamar la suya después de haber estado dos meses en el catering, Bianca las ignoró a todas, dijo que esto era entre The Man y The EST y que la gente quería ver la revancha, pero Becky rechazó el reto: “No esta noche”, aseguró.
Tras desaparecer Becky, se armó el brawl entre las involucradas. No, no hubo un Tag Team Match.
Fatal 4-Way Elimination Match: Bianca Belair vs. Carmella vs. Zelina Vega vs. Liv Morgan. Evidentemente, Bianca iba a tener un rol dominante y así lució hasta el KOD que le propinó a Zelina para eliminarla. Luego vendría el momento de Liv que sorprendió eliminando a Carmella con la Flatliner. Todo se definía entre Bianca y Liv. Ambas tuvieron buenos minutos, donde Liv mostró competirle de igual a igual al gran proyecto de la marca, que no exenta de problemas, logró conectar el KOD para alcanzar la victoria y adjudicarse “una futura” oportunidad por el SmackDown Women’s Championship de Becky Lynch.
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Otro de los cabos a resolverse desde SummerSlam era la irrupción de Brock Lesnar tras la victoria de Roman Reigns y qué postura iba a tomar Paul Heyman. Kayla Braxton fue a consultarle y Heyman, quien iba al camarín de Roman, y con su habitual hostilidad con su compañera de Talking Smack, aseguró que estaba alineado con el actual Universal Champion y le pidió que se apartara, porque él y Roman se estaban preparando para la “Family Celebration” que se iba a llevar a cabo más adelante. Pero al intentar entrar al camarín de Roman, se percató de que la puerta estaba cerrada con llave.
Precisamente, la transmisión hacía un repaso del regreso de Brock Lesnar en SummerSlam, que además de encararse con Roman Reigns, aprovechó la presencia de John Cena para tener un “remember” de SummerSlam 2014.
Paul Heyman aún figuraba fuera del camarín de Roman Reigns y Kayla Braxton otra vez se le acercó, esta vez para burlarse y Heyman increpó a la reportera por no hacer otra cosa más que fastidiarlo. Sin embargo, The Usos salían desde el camarín de Roman para confrontar a Heyman, y junto con informarle que Big Uce Roman no estaba presente, le preguntaron derechamente si tenía conocimiento de que Brock Lesnar se iba a presentar en SummerSlam. Heyman respondió que no tenía idea de aquello y que no tendría por qué destruir todo lo que han construido juntos, pero Jimmy de todas formas quedó con la duda del por qué Heyman no les permitió estar con Roman en su lucha con Cena, Heyman se defendió diciendo que fue orden del Tribal Chief. The Usos se entraron y dejaron solo a Heyman fuera del camarín.
Chad Gable (c/Otis) vs. Cesaro. Breve lucha de demostración técnica de ambos que nos dejó con gusto a poco, ya que Otis entró a salvar a Gable de la Cesaro Swing y juntos acabaron al suizo con una vistosa maniobra doble de un Discus Clothesline de Otis combinado con un German Suplex de Gable.
Kayla Braxton despachaba desde las afueras del Simmons Bank Arena para informar del arribo de Roman Reigns, que se iba a producir en cualquier momento. Sin embargo apareció un lujoso Bentley blanco, del cual se bajó Baron Corbin. Este último, de un éxito en los juegos de azar que le devolvió su estatus, manifestó que ahora era “asquerosamente rico y que estaba feliz”, y ahora se hacía llamar “Happy Corbin”.
Este lunes 30 en RAW tendremos una noche dedicada a los ajustes de cuentas tras las traiciones vividas en la semana. Te llevaremos todos los pormenores con el resumen al estilo Rasslin.
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Veíamos a este nuevo “Happy Corbin” ingresando al ring con su nuevo aspecto de dandy y un titantrón con temática de juegos de casino. Corbin confesó que se había declarado en bancarrota tras haberlo perdido todo y que con sólo $35 dólares se jugó todo en un casino, ahora le cambió la vida y es el hombre más feliz del mundo, sobre todo porque lo hizo solo.
Tras relatar su golpe de suerte, Corbin aseguró ser el Alcalde de Jackpot City, que merecía tal fortuna y que ahora tiene ropa nueva y automóvil nuevo, que su esposa lo recibió con los brazos abiertos, reiteró que lo llamaran “Happy Corbin” porque era el hombre más feliz del mundo y comentó que había algo que lo podía hacer aún más feliz, pero que para eso necesitaba a Big E.

El Mr. Money In The Bank 2021 respondió al llamado, manifestó que estaba contento de ver a Corbin feliz, y que al menos ahora tiene dinero para comprar jabón para no oler mal. Corbin se disculpó por haber tomado su maletín y, cuan Ted DiBiase, le ofreció $ 25.000, $ 50.000 y hasta $ 100.000 dólares por el contrato. Big E rechazó las tres ofertas y dijo que habían más necesidades, pero él podría ofrecerle un sándwich a medio comer, un lápiz que se encontró afuera o un peluche de los Razorbacks de Arkansas, equipo local y al cual la gente reaccionó positivamente, por lo que Big E lanzó el peluche y se armó una especie de ola que el mismo Big E y Corbin comentaron. Corbin dijo que quería que Big E fuera igual de feliz que él y que toda la gente que tiene ese maletín, lo pierde. Big E le recordó que el propio Corbin ha sido uno de los pocos que perdió ese contrato y que, si no se largaba, le iba a borrar la sonrisa de una bofetada. Corbin se alejó sin decir nada.
Volviendo a SummerSlam, la transmisión repasó lo ocurrido entre Edge y Seth Rollins. Más temprano, Edge declaró que fue satisfactorio derrotar a Rollins, pero con ello pagó el precio de llegar hasta su parte más oscura, con repercusiones familiares, y que Rollins ya es capítulo pasado. Sobre el futuro, Edge fue claro y anticipó que iba por lo que Seth le quitó: el Universal Championship.
Por otro lado, Rollins respondió a Edge felicitándolo irónicamente, agregando que tuvo una semana de reflexión tras su lucha en SummerSlam, y que lo que la gente llama Dream Match o una de las victorias más grandes de Edge, para él fue una derrota. Rollins también confesó que tras la lucha, Edge se ganó su respeto y su admiración como WWE Hall OF Famer, y advirtió que, para llegar al Universal Championship, quizás debía ser como él. “Felicitaciones”, cerró Rollins con una sonrisa decidora.
Roman Reigns, también con la camiseta de “The Bloodline” como The Usos, se acercó a Paul Heyman que estaba en la puerta de su camarín. Heyman lució excesivamente nervioso y bastante condescendiente con él.
King Nakamura & Rick Boogs vs. Dolph Ziggler & Robert Roode. Se extrañó a Pat McAfee con la presentación de Boogs al japonés. La misma secuencia de la guitarra con la pierna y los meceos para un Suplex que hizo con Apollo Crews hizo Boogs con Ziggler, luciendo nuevamente, pero con Nakamura más en acción. Boogs sufrió la intervención de Roode, pero en segunda instancia conectó su Pumphandle Slam a Ziggler para llevarse otra victoria a nombre del equipo.
En backstage, Sonya Deville recibía a Naomi. La morena, de vuelta en SmackDown, pidió tener oportunidades en la marca, pero Sonya la subestimó señalando de que no estaba a la altura de la competencia titular. Naomi se molestó y sacó en cara sus años de carrera y que ya había sido dos veces SmackDown Women’s Champion, y Sonya, casi ignorándola, le aseguró que le iba a buscar un lugar la próxima semana.
Rey Mysterio le comunicaba a su hijo Dominik que se apartará de su camino para que brillara con luz propia. Para eso, Rey dijo haber hablado con Adam Pearce para que Dominik tuviera un combate individual, sin saber quién iba a ser su oponente, pero que podía tener éxito si se mantuviera enfocado en su objetivo.
Dominik Mysterio (c/Rey Mysterio) vs. Sami Zayn. El combate acrecentó la crisis de Dominik, cayendo ante las mañas y la experiencia de Sami. Con una Helluva Kick, el triunfo fue para el canadiense y el joven luchador no quiso recibir el respaldo de su padre.
Pasábamos al Main Event de la noche, la “Bloodline’s Family Celebration” que protagonizaron Roman Reigns y The Usos (The Bloodline), quienes en compañía de Paul Heyman, venían a conmemorar sus victorias respectivas por el Universal Championship y el SmackDown Tag Team Championship en SummerSlam. En un tono molesto, Roman le exigió a Heyman pedirle a la gente “que lo reconociera”, recibiendo de vuelta un mar de abucheos. Estos continuaron cuando Heyman presentó a la dupla de Jimmy & Jey antes de referirse a la victoria de Roman para que a Cena “no lo volvamos a ver”, parodiando el gesto de la mano sobre su cara.

La aparición de Finn Bálor interrumpió la ceremonia. El irlandés partió asumiendo que sus planes de enfrentar a Roman en SummerSlam le fueron arrebatados, que Edge y Brock Lesnar están en la órbita, y que iba a retarlo para un Universal Championship Match para Extreme Rules, pero en vista de que no podía confiar en nadie, adelantó su desafío para el próximo viernes. Roman sólo se rió y Bálor comenzó a atacarlo, hasta que The Usos hicieron sentir la superioridad numérica. Pero ellos también tendrían desafiantes, ya que The Street Profits salieron a equiparar las cargas. Roman huyó sin responder el reto mientras Bálor le dejaba un mensaje con un Coup de Grâce a Jimmy Uso.
Con las declaraciones titulares lanzadas, finalizó este SmackDown. Nos encontramos el lunes 30 con el recuento de RAW.
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