De menos a más: Luego de un flojo comienzo, la primera noche tomó fuerzas con el redebut de Cody Rhodes, las dispares emociones en las luchas femeninas y el histórico retorno al ring de “Stone Cold” Steve Austin. Revisemos qué pasó en la jornada el sábado 2 de abril en el AT&T Stadium de Arlington, Texas.
Luego de las dos horas de Kickoff, el show inició con la tradicional interpretación del himno “America, The Beautiful”, esta vez a cargo del músico Brantley Gilbert. Además se ofreció un número a cargo de las Cheerleaders de los Dallas Cowboys bailando “Thunderstruck” de AC/DC.
La lucha que inauguró WrestleMania Saturday fue la válida por el SmackDown Tag Team Championship, donde The Usos defendieron ante Shinsuke Nakamura & Rick Boogs. Por supuesto que Pat McAfee aprovechó de robarse el show con la interpretación del guitarrista como en cada SmackDown. Lucha marcada por una aparente lesión en una rodilla de Boogs que le impidió continuar y Nakamura se llevó el peso hasta que recibió la versión del 3D de los samoanos y la cuenta de tres. Nada que no se haya visto en SmackDown.
A propósito de eso último, Drew McIntyre y Happy Corbin (c/Madcap Moss) protagonizaron la segunda contienda. Durante gran parte de la lucha, Corbin dominó hasta que Moss comenzó a hacerle barra en las cuerdas, lo que entorpeció la ofensiva de Corbin y provocó un comeback de McIntyre. Era perfecto para que terminara ahí, con el triunfo de McIntyre y la separación de Corbin y Moss, pero la lucha se siguió extendiendo y culminó con la frustración de Corbin al ver que por primera vez no pudo vencer tras el End Of Days y la victoria definitiva de McIntyre tras la Claymore. Colocaban esta lucha en SmackDown y nadie se enojaba. Y para coronar, McIntyre para amenazar a Moss, cortó las cuerdas del ring con “Angela”. Tal como dijimos en la previa, el capital popular de McIntyre aún sigue intacto y es menester que lo aprovechen de aquí en más.
Mientras cambiaban las cuerdas, hubo espacio para los auspiciadores y un extenso package para presentar la siguiente lucha: Rey & Dominik Mysterio enfrentando a The Miz & Logan Paul. El enmascarado y su hijo vistieron con los colores de México y USA respectivamente, apegado a su arraigo con Eddie Guerrero. Logan mostró muy buen nivel capitalizando el odio del público y burlándose de los Mysterio con muy buenas versiones del Three Amigos y la Frog Splash. Logan finalmente recibió el Double 619 y la victoria era inminente, pero Miz interrumpió la cuenta y con el Skull-Crusher Finale y le dio la victoria a su equipo. Lo sorpresivo vino después cuando Miz le propinó otro Skull-Crusher Finale a Logan Paul, que con la reacción de los asistentes, perfectamente pudo catalogarse como un face turn.
A continuación, el AT&T Stadium recibió a Stephanie McMahon, quien presentó al medallista olímpico en Tokio 2020, 2-veces NCAA Champion y perteneciente a las filas de la empresa Gable Steveson.
Becky Lynch y Bianca Belair protagonizaron grandes entradas en la lucha por el RAW Women’s Championship. Desde el primer segundo, ambas usaron los elementos de la rivalidad, como la mano y un intento rápido de vencer de Becky como en SummerSlam y la propia irlandesa defendiéndose del KOD tomándose de la trenza de Bianca, luego vino una fase de frustración de Becky hasta que logró seguir con el punto débil de la EST y siguieron el grueso del combate de una forma muy intensa y personal. El trabajo psicológico de Becky y el físico de Bianca estuvieron a la altura de un WrestleMania, vimos cómo la irlandesa intentó por todos los medios vencer a una rival durísima, vendiendo la frustración de forma brillante. Finalmente, Bianca resistió y con un pómulo visiblemente hinchado, logró su redención luego de siete meses con el KOD, venció a Becky y se coronó como la RAW Women’s Champion.
Seth “Freakin” Rollins era recibido por un coro de su tema de entrada para protagonizar el momento más expectante de la noche y esperar en el ring al oponente que Vince McMahon le pondría al frente. Y bueno, los rumores eran ciertos.
Después de hacerse esperar por varios segundos, Cody Rhodes regresaba a WWE tras seis años, con toda su franquicia, su tema de entrada “Kingdom” de Downstait y una ovación exorbitante.
Ambos dieron un combate muy parejo y muy entretenido, pero definitivamente el foco estaba puesto en Cody y la gran recepción de la gente. El American Nightmare incluso se dio la maña de recordar a Stardust con un gesto característico y respondió muy bien a las ofensivas de Rollins, que también sacó buena parte de su arsenal y algunos lujos como un Superplex y Falcon Arrow con el cuerpo de Rhodes invertido, además de traer de vuelta el Pedigree, que Rhodes también resistió. La casa estaba tirada, era la noche de Cody y así lo selló con el codazo homenaje a su padre y tres Cross Rhodes para la cuenta de tres.
El regreso más significativo en el último tiempo en WWE, quizás comparable con Sting. Símbolo de AEW como forjamiento de la competencia de WWE y con golpes recibidos, aquí Vince McMahon equipara trayéndolo de vuelta como un hijo pródigo.
Tras el triunfal regreso de Cody, vino la presentación del WWE Hall Of Fame, Class of 2022: The Steiner Brothers, Queen Sharmell, los póstumos Vader y Shad Gaspard y el headliner indiscutido, The Undertaker.
WrestleMania 38 Saturday contó con 77,899 espectadores en el AT&T Stadium. Aparte, se informó la lamentable noticia del desgarro del cuadriceps de Rick Boogs, lo que lo mantendrá alejado por varios meses fuera de competencia. Mal recuerdo para el muchacho en su primer WrestleMania.
Seguíamos con la lucha que se suponía que iba a cerrar WrestleMania Saturday: el SmackDown Women’s Championship Match donde Charlotte Flair defendía ante Ronda Rousey. Ambas se dieron con todo, cumpliendo con la premisa de buscar sus extremidades para arremeter con llaves de rendición, las que fueron eventualmente mermando aún más el físico, mas no la intensidad. Ronda tuvo por las cuerdas a Charlotte con el Ankle Lock y su habitual Arm Bar y siguieron las movidas y golpes hasta que el referee quedaba out por un empujón. Ronda sorprendió con otro Arm Bar, haciendo que Charlotte se rindiera, pero sin árbitro no pudo ver la victoria. Charlotte reanimaría al referee y conectó una simple Big Boot para terminar con las aspiraciones de Ronda. Gran combate, pésimo final, pero deja la puerta abierta para una revancha.
Será costumbre: WWE confirmó que WrestleMania 39 también se hará en dos noches, el sábado 1 y el domingo 2 de abril del 2023 desde el SoFi Stadium de Los Angeles, California.
Con una lucha menos de las anunciadas en la cartelera, se dio cierre a WrestleMania con el “KO Show” de Kevin Owens y su invitado “Stone Cold” Steve Austin. Una enorme reacción negativa recibió el canadiense, como era de esperarse, y respondió reiterando sus insultos hacia la parcialidad de Texas y manifestó que Austin no iba a hacer nada, por lo que finalizado el encuentro iba a derramarle la cerveza en la calva.
La característica quebrazón de vidrios y “Stone Cold” Steve Austin llegaba bajo una gran ovación de sus coterráneos, dándose el tiempo para celebrar con ellos de extremo a extremo en el escenario e incluso para volver a buscar su quad y lanzar los letreros del “KO Show” en el ring. Owens fue hostil con su invitado, instándolo a sentarse y le manifestó que le había mentido, ya que si intención nunca fue conversar con él, sino desafiarlo a un combate pese a los 19 años de su última lucha y los problemas en sus rodillas y espalda, agregando que el combate será un No Holds Barred Match. Austin le dejó la respuesta a su público y pidió un referee. Campanazo y su regreso al ring ya era una realidad.
Así comenzó el No Holds Barred Match entre Kevin Owens y “Stone Cold” Steve Austin. En este punto daba lo mismo qué tan lento se veía Austin, era totalmente comprensible y lo que veíamos bastaba para prender a todos. Austin le sacó el óxido a sus puños, disfrutó a concho su regreso bebiendo cervezas mientras podía y se vio bastante efectivo, “ayudado” por Owens, quien vendió todo como si estuviera luchando con un rival 5 estrellas. Al ser un combate sin reglas, se desarrolló gran parte fuera del ring, en el público y en el escenario, incluso hasta una mesa se usó, la que obviamente fue impactada por el propio Owens. Austin incluso recibió un Suplex en el piso, dando muestras de que no venía a jugar pese a sus lesiones y fue víctima de su propia movida cuando Owens se la propinó, salvándose de la derrota. Finalmente, Austin finiquitó el combate con la Stunner y la cuenta de tres tras casi 15 minutos de lucha.
Tras la victoria, Austin celebró con más cervezas, saludando a sus coterráneos y con la presencia de su hermano, así como también la del Byron Saxton, quien recibió otra vez la Stunner del héroe local.
Así se acaba un WrestleMania, que pareció haber comenzado como un SmackDown cualquiera y que terminó dando imágenes para la historia. Tu apreciación es valiosa, déjala en nuestra encuesta en Twitter.
Este domingo, seguiremos con la cobertura de WrestleMania 38 con la previa y los resultados de la jornada del domingo.
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